Erase una vez, un niño que decidió nunca crecer… Lo
encontramos en una fiesta, es el centro de atención: divertido, alegre, tiene
mil anécdotas con sus amigos, te conquista con su sonrisa. Sales con él y
seguramente te dice que no busca una relación formal pues no quiere poner
‘etiquetas’ a la relación; cuando por fin superas el tormento de que te
reconozca como su novia, puedes pasar años atrapada en una relación vacía, de
fiesta en fiesta escuchando una y otra vez las mismas anécdotas que un día
sirvieron para conquistarte. Un día despiertas y sientes que la relación no va
a ningún lado, platicas con él y… ¡Sorpresa! Vuelves al principio pues no
quiere tener un ‘compromiso’.
¿Te suena conocido el cuento? Este tipo de ‘chicos’ padecen
el Síndrome de Peter Pan, el psicólogo Dan Kiley denominó así a aquellos
sujetos que no saben renunciar a ser hijos para empezar a ser padres, es decir
que se rehusan a dejar la adolescencia atrás a pesar de estar en los 30, 40 o
50 (…un ‘chavorruco’). Para identificarlos checa estas características:
- · Se rodean de ‘amigos’ más jóvenes para contagiarse de su inmadurez y justificar su actitud inadecuada.
- · No tienen metas a largo plazo.
- · Cuando se sienten amenazados reaccionan violentamente.
- · Buscan relacionarse con mujeres con menor capacidad intelectual o poca madurez emocional, por lo regular mujeres más jóvenes.
- · Son divertidos y fiesteros, el alma de las fiestas.
- · Son ‘bebedores sociales’ o usan drogas para ‘divertirse’.
- · Son seductores natos y muy sociables.
Nada es lo que parece, a pesar de su sonrisa eterna y que
siempre encuentran un comentario que te haga reír; en el fondo, este tipo de
personas son inseguras y tienen mucho miedo al rechazo social y amoroso, temen
a la soledad. Requieren de muchas dosis de afecto y atención pero cuando la
relación requiere de más compromiso, su naturaleza les provoca salir corriendo
y evadir cualquier tipo de responsabilidades. Debemos a este síndrome las
crecientes cifras de madres solteras. Cuando encuentres un hombre así HUYE, de
verdad, tienden a ser destructores de relaciones y con ellos padecerás eternos
dolores de cabeza.
Hoy en día este síndrome no es exclusivo de hombres, también
mujeres que por le regular pertenecen a la clase media a alta llegan a
padecerlo. Son resultado de madres y padres consentidores, que no supieron
marcar límites a tiempo. Por otro lado, el Dilema de Wendy, al igual que en el
cuento, pertenece a mujeres maternales que al no poder controlar su propia vida
adoptan la posición de madre de su pareja. Por lo regular, las Wendys que se
encuentran con los Peter tienden a idealizar que su pareja cambiará y sufren
constantemente de decepción, maltrato y abandono.
La mala noticia para estos chavorrucos es que al final,
efectivamente, terminarán solos.
Colorín colorado… Depende de ti hasta dónde permitas a otros
que te dañen. Por salud mental, toma tus precauciones.
@LuzyAvestruzy
@MomentoSonoro
Muy buena entrada. El error es permitir relacionarnos con "PeterPan" y no darnos cuenta de ello. Gracias
ResponderEliminarMuchas gracias Lula, aceptamos sugerencias para siguientes post.
EliminarGracias Lula, estamos a tus ordenes para sugerencias y reclamos jeje.
EliminarComo puedo saber si mi novio o yo somo peter pan y wendi?
ResponderEliminarTenemos el 33 y yo 28, llevamos 10 años de relación y ninguno queremos dar el siguiente paso, no hay hijos pero peleamos siempre me llama cada 10 minutos, la verdad me siento asfixiada y quiero salir con otros amigos y siempre me cacha, hemos llegado hasta los golpes me puedes ayudar Luzy.
_Gracias
Hola chica, es lógico y sensato que no quieras dar el siguiente paso en una relación de codependencia, claramente tu chico tiene mucha inseguridad y por eso te asfixia con tanto recelo. Si lo amas, es mejor que acudan a una terapia juntos y superen sus problemas. Pero si estas con él solo por temor o compromiso, lo mejor es alejarse para recuperar una vida emocionalmente sana.
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