Witness the Tour - Reseña

Transcurrieron 3 años y medio desde la última vez que Katy Perry estuviera en suelo mexicano con su Prismatic World Tour. Esta es la tercera ocasión que la californiana trae una gira, ahora para promocionar su álbum Witness.

Aunque el álbum que da nombre a esta gira recibió críticas mixtas (pueden leer la nuestra aquí), el espectáculo está cuidado hasta el último detalle y se agradece que Katy Perry no sea de las artistas que acorta el setlist o bien no incluyen todos los accesorios y partes que conforman el escenario.

Perry se divierte en cada canción que interpreta y transmite esa energía a sus fans que la corean y gritan ante cada nueva sorpresa que ella y su equipo tienen preparada para un concierto de dos horas que pasan de manera aceleranda.

En cada acto hace una pausa para hablar con su público siempre para agradecerles y llenar de chistes e ironías cada momento, situación que ya se ha hecho clásica en sus conciertos logrando así no sólo la euforia general que produce el ver a tu artista favorito tomar el escenario, sino también darle un giro de stand-up y dar un plus de diversión y no únicamente la interpretación de las canciones.

En punto de las 9:00 PM las luces de la Arena Ciudad de México se apagaron para dar la bienvenida a CYN, la telonera escogida para las fechas en México y durante media hora estuvo preparando a los fanáticos para el show.

Para esta gira el escenario era un ojo gigante conformado por 3 pantallas LED, del cual emergía una larga lágrima, que es la pasarela que la llevará hasta el fondo del recinto, y otro pequeño escenario a manera de isla también en forma de gota al cual llega volando sobre la audiencia. Muchos de los accesorios que aparecen en cada acto son inflables gigantes que incluyen desde unos labios hasta la cabeza de un león. Cubos de LED levadizos transforman la pista de baile del escenario principal, mientras 3 grandes arcos de luminarias logran que hasta el último rincón del recinto quede cubierto de luces, así como pirotecnia y pistolas de confeti que bañarán de papel a los presentes durante todo el concierto.

Minutos antes de que comenzara el espectáculo, un gran ojo fue proyectado en las pantallas principales, quien atento miraba a los miles de espectadores que esperaban ansiosos. Dicho ojo posteriormente se convierte en la ventana hacia el espacio que nos trasladará a diversos universos a lo largo del evento.

El primer acto comenzó y mostró así toda la espectacularidad que el escenario guardaba. Los acordes de Witness suenan y “el ojo” se abre por la mitad mientras que en luces y humo dan paso a Katy Perry quien aparece flotando en una estrella, “¡Buenas noches México City! Will you be my Witness?”, gritó a la audiencia. Durante Roulette, unos dados gigantes aparecieron en el escenario donde los bailarines hacían piruetas. El escenario se transforma nuevamente, del cual emergían cubos de pantallas LED levadizos donde la coreografía de Dark Horse se llevaba a cabo. Para Chained to the Rhythm unas marionetas gigantes con cabeza de televisión estuvieron en escena recordando la crítica social de la cual trata la canción.

La estética de los 80s toma lugar y Perry dedicó esta sección para cantar sus mayores éxitos y más bailables de sus álbumes pasados. Durante California Gurls, el primer invitado de la noche apareció “Left Shark”, la botarga que se volvió viral tras el show de medio tiempo del Super Bowl en el 2015 y juntos tocaron un piano gigante.

El ambiente se torna romántico, se apostaron unas rosas gigantes con ojos en el centro de la flor y permitió a un bailarín hacer Pole Dance durante Tsunami. Posteriormente se tornó un poco agresivo tras la aparición de plantas carnívoras donde fueron interpretados los aclamados E.T. y Bon Appétit rodeada de insectos, para al final ser devorada por una de las plantas.

Las sorpresas continuaban y para el siguiente acto, Katy sobrevoló la audiencia en un planeta a la vez que inflables de otros planetas aparecieron por todo el recinto. Esta fue la sección acústica del show la cual no sólo llevó a cabo en el planeta volador, sino también en una de las islas del escenario. Aquí Katy Perry habló de lo que significa México para ella al ser el país que más la ha apoyado en su carrera y más le divierte visitar por el calor que le dan sus fans.

Para la parte la recta final, a la mitad de Swish Swish, Perry invitó a alguien al escenario para una partida de básquetbol, y aunque el invitado perdió ante la cantante, ella le regaló una selfie.

Para finalizar el concierto, de nuevo flotó por la multitud, en esta ocasión en un péndulo interpretando la canción del mismo nombre, la cual fue interpretada por primera vez en el show, por último, la ya tradicional Fireworks para cerrar entre explosivos y luces multicolor; aunque esta vez la interpretó de una forma emotiva y sobre una mano inflable que la soporta al final de la pasarela.

Setlist:

·     Acto I – Vegas’ Show

1.       In the Space (Intro)

2.       Witness

3.       Roulette

4.       Dark Horse

5.       Chained To The Rhythm

·     Acto II – The 80’s

6.       Act My Age (Interludio)

7.       Teenage Dream

8.       Hot N Cold

9.       Last Friday Night (T.G.I.F.)

10.    California Gurls

11.    I Kissed a Girl

·     Acto III – Garden

12.    Celestial Body (Interludio)

13.    Déjà Vu

14.    Tsunami

15.    E.T.

16.    Bon Appétit

·     Acto IV – Space

17.    Mind Maze [Instrumental] (Interludio)

18.    Wide Awake

19.    Into Me You See

20.    Power

·     Acto V – 8 Bits

21.    Videogame (Interlude)

22.    Part Of Me

23.    Swish Swish

24.    Roar / Hard Knock Life

·     Acto VI - Encore

25.    Pendulum

26.    Fireworks

Mientras tanto, la gira Witness seguirá su camino por Monterrey y Guadalajara para continuar por Europa y cerrar en Oceanía. Alguno de estos destinos será el elegido para grabar el DVD de la gira, el cual, tras ver el espectáculo en vivo, no podemos esperar para tenerlo y poder revivir el momento en el que de una nueva era de Katy Perry fuimos testigos.

Adoolph
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