El día que cambio mi vida…

Un domingo de Abril me levante algo tarde, no dormí muy bien, dos veces en la noche me desperté con una sensación de que me ahogaba y me faltaba el aire, me levante y me bañe, me dolía mucho el cuello y pensé “seguro dormí mal”; baje a la cocina y desayune, me encontraba sola en casa ya que mis padres habían salido a un viaje de una semana. Yo tenia planes para ir con mi hermano, mi cuñada y mi sobrina, para pasar una tarde en la plaza y comer, fui un día normal salvo por el dolor de mi cuello.

Termino el día deje a mi hermano en su departamento y me fui a la casa, cuando llegue me dolía aun mas el cuello, al desvestirme e ir al baño me percate de una bola enorme que estaba en mi cuello del lado izquierdo y al tocarla me dolía  no me había percatado  porque ese día usaba una blusa de cuello de tortuga y hasta que me la quite pude darme cuenta de lo que tenia, me espante, no sabia que era, ya era muy noche pero quería ir al doctor inmediatamente pero dije "no puedo ir sola", le hable a mi abuela que vive muy cerca, le llame y le explique que es lo que pasaba, vino a la casa y le mostré  le dije que mañana quería ir a ver a mi medico familiar y quería ver si ella me acompañaba,  porque si esto era grave pues tenia que atenderme en el seguro.

A la mañana siguiente el dolor era aun mas insoportable seguía igual y no había bajado nada la inflamación, llego mi abuela y lo único que hice fue ponerme una mascada para cubrir el cuello, llegamos a la clínica y por fortuna no había mucha gente y pase rápido  la doctora me dijo “Hola Heidi, dime que te pasa”, me quite la mascada, sus ojos denotaron sorpresa y comenzó la revisión  al terminar, me dijo que fuera a urgencias de mi Hospital General de zona, la nota clínica decía Tumor Gigante, me espante aun mas. Fui con mi abuela inmediatamente y el doctor de urgencias me reviso nuevamente, me tomo una radiografía y se veía claramente como el tumor comprimía la traquea, lo que explicaba mi dificultad para respirar y me dijo que era muy probable que dependiera de la tiroides pero que cirugía o endocrinología me tenia que evaluar primero. Me dio el pase para endocrino, cita que me la dieron hasta el 2 de mayo por la mañana, pero también un pase abierto a urgencias si no podía respirar o me sentía mal.

Llegamos a casa y me quede platicando con mi abuela hasta que me calme, se fue y me quede nuevamente sola, comencé a llorar desconsoladamente, mil preguntas llegaron a mi cabeza, porque a mi, que es lo que me pasa, sera malo, que voy a hacer y yo sola… finalmente me quede dormida.

Mis Padres me llamaban de vez en cuando y yo no podía decirles que vinieran que los necesitaba, tenia que mentirles y decirles que todo estaba bien, no podía preocuparlos y alejarlos de sus vacaciones, fue una de las semanas mas largas de mi vida. Cuando llegaron por fin, mi padres de inmediato supieron que algo no estaba bien, les platique todo lo que me paso esa semana.

Fueron días largos, un amigo de donde yo trabajaba me recomendó un doctor el Dr. Sanchez, un endocrinólogo especialista en enfermedades de la tiroides, me dijo “No pierdes nada”, saque la cita y casualmente fue para el 2 de mayo por la tarde. Llego el día de la cita y fue la misma doctora que me había diagnosticado Hipotiroidismo un año antes, ya para ese entonces el dolor y la inflamación había pasado, cuando llegue me reviso y reviso el historial, me mira y dice “tu no tienes nada”, "mira sigues igual no has perdido peso y seguro lo que paso fue una inflamación muscular", entre otras cosas mas, solo me hizo enojar mas, lo único que le conteste fue “Como se atreve a decir que no me pasa nada solo con verme, de menos tiene que hacerme unos estudios, algo” y solo me contesto “Esta bien te mandare a hacer un ultrasonido” y solo le arrebate el papel y me fui, salí muy enojada, quería ir a quejarme, pero tenia cosas mas importantes que hacer.

Por la tarde acudí a la cita con el Dr. Sanchez en un hospital privado, mi mamá esta vez me acompaño. El doctor era muy amable y muy cordial, le explique lo que me había pasado en los últimos días y me dijo que me haria un ultrasonido ahí mismo. Me recosté sobre la mesa de exploración y comenzó el estudio, me dijo que si había una masa de mas o menos 4 cm y la tiroides se veía algo crecida del lado izquierdo y que el tejido no se veía uniforme. Regresamos al escritorio y me hablo de las posibilidades de diagnostico y tratamientos, pero que aun así tenia que hacer una biopsia para tener un diagnóstico más acertado. Me dio cita para el siguiente viernes.

Trate de seguir con mi vida lo mas normal posible, aun no le decía a nadie lo que me estaba pasando. Vinieron mas días largos, pero por fin llego el viernes día de la biopsia, el doctor me dijo que estaría acompañado de otros médicos, me recosté en la mesa de examinación nuevamente, me aplico anestesia local pero aun así me dijo que me iba a doler, desgraciadamente por el hecho de estar metida en el ramo medico me permite entender muchos de los términos médicos. Cuando se me estaba practicando la biopsia, entendía perfectamente lo que decían  Y ahí fue cuando me golpeo una palabra “Cáncer”, no lo dijeron con esas palabras, pero imagine que a eso se estaban refiriendo, después de que terminara la biopsia lo que me hizo darme cuenta de que algo estaba muy mal, fue la actitud del doctor, me hablo mas sutilmente y le faltaba esa sonrisa característica de el, no mostraba  mucho animo, me explico que se podría tratar de Cáncer, pero el tenia una esperanza de que no fuera eso, pero si era positivo el resultado había tiempo para atacarlo y había que operar de inmediato. Los resultados los tendrían hasta el próximo lunes quizás martes, pero que el me llamaría personalmente.

Yo Salí devastada de esa consulta, recuerdo que fui al baño y le dije a mi mama con lagrimas en los ojos “Mama, tengo cáncer, ese día me di cuenta a lo que me podría estar enfrentanto en mi futuro. Mi madre trataba de animarme y que pensara que se trataba de otra cosa. Los días subsecuentes fueron los mas largos de mi vida, llego el lunes y llame a su consultorio me dijo que aun no tenia los resultados pero que posiblemente el día martes los tendría.

Llego el día martes, casualmente era 10 de Mayo del 2011, el cual yo me encontraba en mi oficina porque solo íbamos a trabajar medio día   estaba yo muy tranquila cuando sonó mi celular, era el Dr. Sanchez, después de los saludos de regla, me dijo: “Heidi, lamento informarte que el resultado es positivo, tienes Cáncer de Tiroides, yo simplemente me tape la boca y comencé a llorar, me dijo que no me preocupara, que el conocía al Doctor encargado del Depto. de endocrinologia de la Raza que si me hacia una cita, las palabras no me salian, solo pude decir "si" y me dijo que me llamaría en 5 min. Así lo hizo y me confirmo la cita al día siguiente con el Dr. Sosa. Pero no dejaba de llorar, hable con mi jefa le explique la dituacion y me retire  temprano, no pare de llorar en todo momento, preguntándome "porque a mi"  pero llegue a casa de mi abuela donde,  se supone que nos íbamos a a reunir para festejar a las Mamas, lo primero que llego a mi mente fue “Vaya regalo que le daré a mi Mama”, pero trate de tranquilizarme y  esperar que mi familia no se diera cuenta.  Sin querer mi mama salio y me vio en el carro, solo basto una mirada para que se diera cuenta de lo que pasaba, nos abrazamos y lloramos.

Entramos a la casa y mi mama fue la que dijo “Es Cáncer , después de ese momento no recuerdo muy bien lo que paso, solo pensaba… Hoy ha cambiado mi vida para siempre.

Esa noche mis papas y yo lloramos juntos, creo que esa día jamas lo olvidare.

Desde el día siguiente vinieron muchos cambios, muchas citas con doctores, estudios, tomografías  piquetes, infinidad de cosas, mi cirugía fue el 24 de agosto del 2011, pase una semana en el hospital por algunas complicaciones de la misma, casi sin voz porque quedo dañado el nervio que controla las cuerdas vocales, el cirujano me dijo que el Cáncer estaba extendido hasta los nódulos linfáticos de mi cuello, mismos que había removido y que el calculaba que el Cáncer ya estaba desde hace 6 años aproximadamente, lo que le pregunte es como nunca me di cuenta y me dijo "un simple examen de sangre y un estudio de tiroides hubiera bastado", pero como todos los Cáncer solo da signos hasta que ya se encuentra avanzado. El resultado de patología llego hasta un mes después  donde confirmaba el diagnostico Cáncer Papilar de Tiroides y el resultado decía que habían retirado 8 tumores.

Después de que me dieran de alta regrese a casa con mis brazos morados por tantos piquetes, conté 17 en un brazo y 15 en el otro, me paso de todo, no podía casi moverme, no podía bañarme sola, tenia una contractura muscular desde la espalda baja hasta la nuca extendiéndose hasta el hombro izquierdo, se me abrió la herida y se me quería infectar, me suturaron nuevamente, me dieron antibiótico y me causo una alergia espantosa en todo mi cuerpo.

Regrese después de un mes a mi trabajo con una cicatriz que va desde la clavícula derecha hasta mi oído izquierdo, ahora va cubierta por una mascada desde ese día.

En el año siguiente, 2012; fui sometida en abril a una especie de radiación para matar las células restantes, permanecí hospitalizada y aislada por 4 días  porque literalmente estaba radioactiva y no podía estar cerca de la gente. En Junio de ese mismo año me dieron 25 sesiones de radioterapia, iba 5 días de la semana y descansaba 2, las primeras semanas aun iba a trabajar solo que me sentía muy cansada, para la tercera semana, ya no podía comer sólidos, tenia muchas nauseas, me la pasaba vomitando después de cada sesión, me dolía mucho la garganta y hasta pasar saliva era muy doloroso, se me cayo el cabello, siempre estaba cansada y las pastillas para el dolor me noqueaban, baje 6 kilos en 3 semanas.

Después de un mes regrese a trabajar, poco a poco comencé a recuperar mi vida, salia ya con amigos, con mi familia, asistía a fiestas, conciertos, entre otras cosas.

Mi vida cambio desde ese 10 de mayo de 2011, mas allá de todo lo que me ha tocado pasar, he bajado 16 kilos desde entonces, por fin entendí que tener esos kilos de mas no era mi culpa, he recuperado mi trabajo, soy una luchadora y veo a la vida de una manera diferente, la disfruto pero sobre todo VIVO LA VIDA y disfruto cada segundo de ella, soy mas positiva y aunque aun no estoy libre de Cáncer, mantengo una esperanza muy grande y se que lo venceré.

La recomendación que puedo darte es que nunca dejes de cuidarte y checarte continuamente, si algo te molesta ve al doctor y atiendete. Y también lo mas importante VIVE LA VIDA Y APROVECHA LAS OPORTUNIDADES QUE SE TE PRESENTEN SIEMPRE.

Heidi Blue @Nitdblue