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feminismo lingüístico (r.l.02.) Cuando digo o escribo los hombres o el hombre quiero, como la mayoría de las personas que utilizan est...

feminismo lingüístico feminismo lingüístico

feminismo lingüístico

feminismo lingüístico


feminismo lingüístico
(r.l.02.)

Cuando digo o escribo los hombres o el hombre quiero, como la mayoría de las personas que utilizan estas palabras, designar al ser humano.[1] Esta advertencia es necesaria dado al aumento considerable en las filas del feminismo (y del feminazismo); al cuál se le da por creer que el uso de estas palabras es un modo, ya sea, ligero de misoginia, ya de serio machismo, ya de discriminación. Los hombres o el hombre son palabras que, simplemente, ahorran espacio por ser más cortas que la humanidad o el ser humano. Quizá alguna feminista radical podría ver aún en el ser humano machismo, cabe decir que la ser humana, es una aberración gramatical, mientras que podría aliviarle la humanidad que es femenino en género, pero en género lingüísticamente hablando, o sea es una categoría en gramática; no más.
En lingüística el género es una categoría gramatical basada en la concordancia entre artículos, sustantivos, adjetivos, pronombres, etcétera. El género expresa si algo es masculino, femenino o, inclusive, neutro, que no es muy común en español (como por ejemplo sí lo es en alemán) pero existe. Cabe decir que el género gramatical es sólo una forma de ver las cosas de manera humano-biológica; es decir, el ser humano —por no decir el hombre— se pro-yecta sobre su mundo al describirlo por medio de cómo él se percibe: esto es, con sexo. Lo que digo es evidente cuando pensamos en que el sexo, que es una característica netamente biológica, se usa para hablar del mundo. Ejemplo: la leona tiene león, sino no habría leoncitos, pero la llanta no tiene llanto, ni la motocicleta motocicleto; y, sin embargo, existen y sigue habiendo más llantas y más motos, inclusive en mayor número que leoncitos, irónicamente.
Esto queda más claro cuando hablamos del género natural que en lingüística es una categoría gramatical que se refiere al sustantivo y sirve para indicar el sexo real de las personas o de los animales: femenino para hembras y masculino para machos.
Entonces el género en gramática ni lingüística es sexista; mucho menos puede ser machista ni feminista. Sin embargo, hoy en día, cuando es políticamente correcto alabar y aparentar la equidad de sexo (nunca igualdad de sexo[2]) se llega a decir jefa cuando una mujer es jefe, como si se le dijera jefo cuando es hombre. Esto equivaldría a decir que los sustantivos como mar o radio son de género bisexual, puesto que es igual de correcto decir la mar que el mar o la radio que el radio.[3]
Algunas feministas, pues, confunden el género gramatical con el sexo fisiológico; confunden la gramática y/o la lingüística con la biología. Así, el feminismo lingüístico es imposible, por lo menos hoy.

Es más, el llamado género humano es el conjunto de seres que pertenecen a la especie humana, pues género significa un conjunto o agrupación de varios seres u objetos que poseen propiedades comunes. Evidentemente, otra cosa muy distinta significa género cuando se habla de diferencia de género o perspectiva de género.[4]

Entonces, cuando se dice el hombre refiriéndose a la humanidad, más que machismo es una confusión de términos muy común, como se puede ver:
Un hiperónimo es el término que tiene un significado general que incluye el de otros términos más específicos hipónimos): ser humano es el hiperónimo de hombre (y de mujer); un hipónimo es el término cuyo significado es más específico respecto a otro (hiperónimo) de significado más general: las palabras mujer y hombre son hipónimas de los términos humanidad y ser humano.
El hombre no es igual a humanidad nunca, puesto que un hipónimo nunca es un hiperónimo… lo siento, no veo el machismo… quizá no lo veo porque no lo hay.


[1]“El hombre es la medida de todas las cosas”, “El hombre es el lobo del hombre”, etcétera.
[2] La idea de igualdad de sexo no debe de entenderse superficialmente, pues sería una contradicción de principio, puesto que el sexo es una diferencia biológica nunca puede o podrá haber igualdad. Con igualdad de sexo se quiere expresar, esencialmente,  justicia (representada por esa señora con una balanza en una mano y ciega, para garantizar igualdad de trato y no distinguir entre ricos, pobres, hombres o mujeres), no más.  
[3] Mar y radio son ejemplos lingüísticos de género ambiguo, pues son sustantivos de cosas que se emplean unas veces con artículo masculino y otras con femenino.
[4] Para este otro concepto de género ver “estudios de género” en wikipedia.

2 comentarios:

  1. Échale un vistazo al término género, ya que tu falta de información es directamente proporcional a las tonterias que dices en este artículo.

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  2. Al término genero desde el aspecto lingüístico?

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